El actor angloirlandés Michael Gambon, conocido por su papel de Albus Dumbledore en la saga Harry Potter, falleció hace pocos días a los 82 años, debido a una neumonía.
Ganador de cuatro premios BAFTA y nominado a dos premios Emmy, se
casó a los 22 años con la matemática Anne Miller.
Deja tres hijos.
Nacido en Dublín en 1940, Gambon se hizo un nombre como discípulo de Laurence Olivier en el Royal National Theatre, convirtiéndose en uno de los intérpretes de teatro clásico más importantes de Reino Unido.
Su debut cinematográfico tuvo lugar en la versión de Otelo protagonizada por su mentor en 1965 y, aun siendo un prestigioso actor ya en esa época, durante esos años se prodigó más en series de TV o en el teatro, rechazando incluso una oferta para interpretar a James Bond después de que George Lazenby abandonara la franquicia.
En los 80's ya empezó a añadir abundantes títulos cinematográficos a su carrera, y le pudimos ver en films como Una llamada a medianoche (1988) o El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante y el título ya de culto Seducir a Raquel, ambas de 1989.
De esa década también es la miniserie El detective cantante, amarga parodia del noir que ha quedado como uno de los mejores trabajos de su carrera.
Los 90's nos acercaron más a él ya que se convirtió en un gran secundario en films muy dispares. Muestra de ello son El imperio del mal (1991), Toys (fabricando ilusiones) (1992), Borrón y cuenta nueva y La versión Browning, ambas de 1994, Mary Reilly (1996), o El dilema (the insider) y la genial Sleepy Hollow, ambas de 1999.
El nuevo milenio le traería grandes trabajos como el de Gosford Park (2001), Open Range y Sylvia, ambas de 2003, pero fue su elección y valor para sustituir al gran Richard Harris (fallecido en 2002) como Ambus Dumbledore en la saga Harry Potter, entrando en Harry Potter y el prisionero de Azkabán (2004) hasta Harry Potter y las reliquias de la Muerte - Parte II (2011), lo que le daría una extraordinaria fama mediática.
De esa primera década de los 2000, además de la saga mágica, se le pudo ver en el remake de La profecía, Amazing Grace y El buen pastor, todas de 2006, o Retorno a Brideshead (2008).
La segunda década la empezó con El libro de Eli y El discurso del rey, las dos de 2010, mientras filmaba el doble episodio final de la saga Harry Potter.
Después de abandonar el mundo de Hoghwarts, se dedicó más a la pequeña pantalla, pero colaboró en películas como ¡Ave César! (2016), Kingsman: el círculo dorado (2017), la comedia Johnny English de nuevo en acción (2018) o, sus dos últimas películas, Judy y Cordelia, ambas de 2019.
Desde ROCKBUSTERS alzamos nuestra varita mágica para despedir a un grande de la escena británica, aunque no fuera tan mediático como otras estrellas de su época.
Ver morir a Dumbledore en la gran pantalla fue doloroso... saber que Gambon ya no nos regalará más actuaciones nos parte el alma!
Descanse en paz, Director Dumbledore!
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